En el establecimiento agropecuario “San Juan” en Florentino Ameghino, se divisó la presencia de pumas. El hecho ocurrió el sábado por la tarde, cuando empleados del campo estaban realizando tareas de picado en un lote de maíz. Se supo también que serían en total cuatro los felinos, aunque solo se pudieron filmar dos.

En contacto con Ameghino On Line, el propietario del establecimiento Jackie Harrison admitió que la aparición de pumas se hizo más frecuente “desde hace unos cuatro o cinco años”, aseguró.

“En ese momento – explicó Jackie – tomamos la decisión de poner burros en el campo y eso nos ayudó a evitar daños en rodeos de hacienda”.

Agregó también que “nos hemos enterado de daños en campos de los alrededores, pero acá no, por eso considero que la presencia de burros da resultado”, afirmó

El burro delante para que el puma se espante: ¿Sabías que estos animales pueden servir como protectores de ovinos y bovinos?

Según destaca el portal web bichosdecampo.com, ante la presencia del depredador, un buen burro protector se interpone entre los animales a proteger y el depredador. Los burros y mulas, por naturaleza, son agresivos hacia depredadores. Realizan veloces persecuciones y rebuznan con tanta intensidad, que incluso pueden llegar a alertar al ganadero sobre la presencia del depredador. Si luego de esta instancia el depredador persiste en su intento de atacar al ganado, el burro puede atacarlo pegándole con los miembros delanteros”, indicó De Lucca en el trabajo.

Sin embargo, más allá de sus aptitudes natas el éxito de esta empresa dependerá de su correcta aplicación. Es así que, para el veterinario, la clave está en la relación que el burro pueda generar con la majada a proteger.

“Lo ideal, si es que se busca realizar una impronta temprana con la majada, es que la burra y su cría se mantengan junto a las ovejas, y al destete dejar al burrito con la majada. De no haber sido esto posible (por ejemplo, si se compra un burro), igualmente se le puede enseñar al animal a defenderlas si se lo coloca en estrecho contacto con los animales a proteger durante 1 a 2 semanas. Hay que tener muy presente que no todos los burros son buenos guardianes y que incluso algunos pueden llegar a ser agresivos con las ovejas. Por este motivo este proceso de “unión” debe ser monitoreado por el productor”, explicó De Lucca.